Hay un dicho muy popular en España que viene a decir algo así como que "las alegrías duran poco en la casa del pobre". Un dicho que podría ampliarse también a la casa del rico, si tenemos en cuenta el breve reinado en la cumbre de las empresas más valiosas del mundo que ha ostentado Apple esta semana.
Hoy en día, si no ya desde siempre, que tu marca esté bien valorada en la opinión de la gente, no solo te hace más visible de cara a potenciales clientes futuros, si no que también te suele asegurar una reputación a prueba de balas entre los usuarios ya asentados y en los cada vez más determinantes medios o redes sociales.
Steve Jobs es una persona que ha sabido invertir su dinero en cada momento. Primero empezó creando Apple y los primeros ordenadores personales. La cosa funcionó bastante bien y después de muchas idas y venidas en los últimos años la compañía está viviendo su mejor época con unos beneficios que no dejan de crecer trimestre a trimestre.
Cada año la revista Forbes publica su Forbes 400. Esto no es más que una lista con las 400 personas más ricas de todo el país. Este año Jobs ha escalado puestos en la lista y ya se sitúa en el puesto 43 de la mencionada lista. Su fortuna actual está valorada en unos 5.100 millones de dólares. El año pasado Jobs se situaba en el puesto 61, pero gracias a la crisis (y pérdidas de otra gente) y la continúa subida de Apple, Jobs no pierde posiciones, sino que las escala.
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