¿Pueden acceder a mi cuenta bancaria si me roban el iPhone? Sí y así es como se hace

Que te roben tu iPhone ya supone de por sí un susto y un disgusto considerable. Estamos hablando de un dispositivo que no solo es que no sea precisamente barato, si no que además en él guardamos una buena cantidad de datos personales, valiosos en más de un sentido: desde fotos o vídeos a información sensible que no queremos perder ni que caiga en otras manos.

Pero si toda esa pérdida no fuera suficientemente, existe un motivo añadido de preocupación y es que algunos ladrones no están destinando los iPhone robados a la habitual reventa en el mercado negro, si no que se están valiendo de los mismos para acceder a las cuentas bancarias de sus usuarios. Y, por desgracia, es un procedimiento más sencillo de lo que se pudiera suponer.

La policía de la ciudad brasileña de Sao Paulo detuvo hace unos días a una peligrosa banda local que se especializaba precisamente en el robo de smartphones y durante los interrogatorios ha trascendido cómo se las arreglaban para burlar la seguridad de los dispositivos de Apple, jactándose de ser capaces de desbloquear cualquier iPhone.

Ya ya decimos que no es algo complicado ni que requiere unas enormes habilidades de hacker o acceso a tecnologías más o menos costosas como hacen, por ejemplo, las agencias de seguridad. De hecho, solo necesitan una cosa para acceder a nuestro iPhone: la tarjeta SIM.

Lo que hacen es introducir la SIM del dispositivo robado en otro iPhone y localizar en las Redes Sociales el correo electrónico de la persona a la que le han sustraído el teléfono, que muchas veces está mismamente guardada sin protección en la app de Notas o en el Llavero de iCloud, junto con otros datos relevantes, y usarlo para restaurar la contraseña de esa Apple ID. Eso cuando no es el mismo usado en la propia Apple ID, que también suele pasar.

Una vez desagrados los datos de la nube al nuevo dispositivo, buscan información clave relacionada siempre con las palabras Contraseña o Password y eso suele ser bastante para acceder a varios sitios, entre ellos, la cuenta corriente de la víctima. Entonces devuelven la SIM al iPhone original y desde ahí se encargan de sacar partido a la información obtenida.

Apple está trabajando en mejores formas para poder localizar y borrar los datos si perdemos o nos roban el iPhone, pero la mejor manera de evitar situaciones como esta, a falta de usar una eSIM, es no almacenar datos sensibles en apps poco seguras. Si ese es tu caso, aprovecha y elimínalas de ahí cuanto antes.

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